Brecha Digital.

Como bien han señalado mis dos compañeras en las pasadas publicaciones al respecto, podemos entender la "brecha digital", como la diferencia existente entre las personas o países, en lo relativo al acceso a las comunicaciones o nuevas tecnologías, específicamente en lo que se refiere a Internet o nuevas herramientas computacionales.
En la actualidad uno puede apreciar esta brecha por el simple hecho de que día a día van surgiendo nuevas tecnologías o se van actualizando los computadores, quedando uno cada vez más obsoleto, debiendo invertir en forma continua y constante en nuestra "maquinita" para no quedar fuera de los avances que inundan nuestra vida.

Pero, llendo aun mas allá, si bien, uno en primera instancia relaciona este tema con un tema netamente económico, mirado desde la realidad país de uno, podríamos decir que todos nosotros, como ciudadanos de Chile frente al resto del mundo, esencialmente frente a países desarrollados, o asiáticos, por nombrar a los más tecnologizados, nos encontramos a años luz respecto a los servicios básicos que ellos presentan. Por ejemplo, respecto a lo que comúnmente vemos día a día por televisión en los comerciales de las empresas de telefonía, que nos invitan a contratar por la banda ancha "más rápida" que pueda existir, en realidad es un porcentaje ínfimo de la real velocidad que nos pudieran ofrecer, y que en nuestro país no baja de los 30 mil $ por obtener un buen servicio, en un país desarrollado como Corea del Sur, se encuentra garantizado para cada uno de sus habitantes.

Otro claro ejemplo de esta brecha digital, es el que pudimos apreciar hace algún tiempo con la idea de nuestra Presidenta de que cada familia tuviera un computador, algo mencionado en parte en el pasado discurso presidencial. Estos computadores que fueron otorgados como la "gran ayuda" para estas familias, básicamente de escasos recursos, la verdad fue una vergüenza, ya que eran sistemas operativos "ultra" básicos, que más allá de la pantalla y el teclado, por decir algo, no era mucho lo que se podía rescatar.
Así que nos queda mucho camino aún para intentar disminuir esta brecha, termino que tan familiar se nos hace...